BARCELONA. (Redacción).- En 1985, la señora Danuta Danielsson le arreó un bolsazo en la coronilla a un neonazi en la localidad sueca de Växjö. El fotógrafo Hans Runa tomó una instantánea del momento que se hizo enseguida famosa. La señora Danielsson, de origen polaco, tenía sus motivos: resulta que su madre fue enviada a un campo de concentración nazi, del cual sobrevivió.
Ahora, treinta años después, la artista Susanna Arwin pretende hacerle una estatua a Danuta Danielsson, y ha presentado un modelo en arcilla que reproduce su gesto. Pero el ayuntamiento de Växjö (60.000 habitantes) se ha cuestionado si el monumento constituiría o no una exaltación de la violencia.
¿Puede ser violenta una mujer con un bolso, enfrentada a un grupo vocacionalmente violento? El ayuntamiento ha decidido vetar la estatua, pero el caso ha provocado que los partidarios del monumento cuelguen bolsos de señora en estatuas de todo el país, y algunos municipios ya han ofrecido espacio a Susana Arwin para colocar su obra.
La señora Danielsson guardo silencio hasta su muerte sobre el gesto que la hizo famosa, aunque parece que no se enorgullecía de él, según publica The Washington Post.
Pero en el diario sueco Dagens Nyheter, Ola Larsmo comenta: “Probablemente ella sabía mucho más acerca de lo que es el nazismo que el joven con la cabeza rapada. ¿Quién tiene el derecho de ofrecer resistencia y cómo? ¿Y cuándo?”
http://www.lavanguardia.com/internacion ... lenta.html
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