Bellísima carta desde la prisión de la periodista feminista kurda Zehra Dogan
"Siempre he tratado de existir a través de
mis pinturas, mis noticias, y mi lucha como mujer. Ahora, aunque
estoy atrapada entre cuatro paredes, sigo pensando que he hecho
absolutamente mi deber en su totalidad. En este país, oscuro como la
noche, donde todos nuestros derechos han sido tachadas con el rojo de
la sangre, yo ya sabía que iba a ser encarcelada.
Quiero repetir la enseñanza de Picasso: ¿realmente cree que un pintor es simplemente alguien que utiliza su pincel para pintar los insectos y las flores? Ningún artista gira la espalda a la sociedad; un pintor tiene que usar su pincel como arma contra los opresores. Ni tan siquiera los soldados nazis juzgaron a Picasso a causa de sus pinturas, y sin embargo se me juzga a causa de mis dibujos.
Voy a seguir dibujando. Cuando una mujer toma libera tal derroche de colores, se puede salir de la prisión, a base de pinceladas. Pero son sólo pinceladas .... No lo olvidéis, ¡es mi mano que sostiene el pincel! ".
Nota de KurdisCat:
Zehra Dogan era editora de la agencia Jinha a quien ha remitido el texto desde su celda en la prisión de tipo E de Mardin (Kurdistán turco). Entre las acusaciones del régimen turco hay la de retratar, con sus dibujos, la represión violenta de Ankara en territorio del Kurdistán del norte.
Quiero repetir la enseñanza de Picasso: ¿realmente cree que un pintor es simplemente alguien que utiliza su pincel para pintar los insectos y las flores? Ningún artista gira la espalda a la sociedad; un pintor tiene que usar su pincel como arma contra los opresores. Ni tan siquiera los soldados nazis juzgaron a Picasso a causa de sus pinturas, y sin embargo se me juzga a causa de mis dibujos.
Voy a seguir dibujando. Cuando una mujer toma libera tal derroche de colores, se puede salir de la prisión, a base de pinceladas. Pero son sólo pinceladas .... No lo olvidéis, ¡es mi mano que sostiene el pincel! ".
Nota de KurdisCat:
Zehra Dogan era editora de la agencia Jinha a quien ha remitido el texto desde su celda en la prisión de tipo E de Mardin (Kurdistán turco). Entre las acusaciones del régimen turco hay la de retratar, con sus dibujos, la represión violenta de Ankara en territorio del Kurdistán del norte.
